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sábado, agosto 06, 2011

Mi tío de Lima - cuento

Vía Puente Aéreo pude conocer un cuento de una escritora argentina llamada Hebe Uhart.

Aquí el arranque, por si quieren continuar con el cuento..

¿Con quién vives ti?

–Con mi mamá, mi papá y mi abuelita-dije.

–Ve a llamar a tu mamá, ¿quieres? Dile que vino José Mazzini de Lima.

Observé que la fórmula peruana para pedir una cosa era diferente : él no quería decir si yo quería ir a llamar a mi mamá, era como si dijera: “Quiero que llames a tu mamá con tu consentimiento”, pero disentir era imposible.

La voz era rica, plena, suave. No era una voz de argentino. Era como si brotara de algún lugar profundo dentro de él y como si vibrara un poquito en su cuerpo.


Puede leerlo completo desde aquí: Mi tío de Lima - La nación
Este es un post de El sitio de Kinua

domingo, mayo 13, 2007

Tres cuentos en 24 horas

A lo largo de las últimas 24 horas he tenido la suerte de que me cuenten/en directo o diferido/ tres cuentos. Llegaron a mi los dos primeros simultáneamente aunque por distintos medios:
- el primero cronológicamente, por correo electrónico, adjunto, escrito con la intención de ser "analizado" para un examen algún curso de comunicaciones en un diplomado extraviado de género - vía Gonzalo Portocarrero
- el segundo empezó a sonar vía TVPERÚ mientras terminaba de leer el primero, Francois Valleys mirando a la cámara, mientras su hija y Giacosa esperaban fuera de cámara sentados, uno escuchando con atención y la otra probablemente aburrida de las tantas veces narrada historia.
- el tercero, y que fue el que me animó, empujó, lanzó, estrelló contra el teclado para dar cuenta del mismo, vía la lista de interés de nuestro tío Juan Gargurevich.

Quedan entonces en los siguientes posts los cuentos para su disfrute, análisis, goce, indiferencia o rechazo.

Abiertos están los comentarios como siempre.


- El primero, cuento para examen


- El segundo, cuento para TV, El cántaro agrietado

- El tercero, cuento largo pero moderno

Vía Francois Valleys - El cántaro agrietado

Bueno en verdad vía TVPERU - Francois Valleys contando cuento .


(esta forma no respeta la "manera" de contar de Francois Valleys, pero replica el cuento, ubicado en ANGELMARÍA)

Un aguador tenía dos grandes cantaros. Una de las vasijas tenía una grieta, mientras que la otra era perfecta y entregaba el agua completa al final del largo camino a pie desde el arroyo hasta la casa del sabio que iba a visitar todos los días.

Cuando llegaba, la vasija rota solo contenía la mitad del agua. La pobre se sentía avergonzada de su imperfección y miserable porque solo podía conseguir la mitad de
lo que se suponía debía hacer. Después un tiempo le habló al aguador diciéndole:

-Estoy avergonzada de mi misma y me quiero disculpar…
- ¿Por qué? le preguntó el aguador.
-Debido a mis grietas, solo puedes entregar la mitad de mi carga.

El aguador se sintió le dijo: “cuando volvamos quiero que te fijes en las bellísimas flores que crecen a lo largo del camino.”

Así lo hizo y en efecto vio muchísimas flores hermosas, pero seguía apenada porque al final solo llevaba la mitad de su carga. El aguador le dijo: ¿Viste que las flores crecen sólo en tu lado del camino?, siempre he sabido de tus grietas, sembré semillas de flores a todo lo largo del camino por donde tú vas y todos los días tú las has regado. Luego yo recojo las flores para decorar el altar del maestro. Gracias a que eres así, él puede disfrutar de esa belleza sobre su mesa.

Víe email Gonzalo Portocarrero - sin preguntas solo cuento

Se comenta que en un pueblo que se encuentra en la serranía del país, que había un sacerdote que tenía un alto poder de convencimiento sobre los pobladores. Resulta que en realidad era el demonio que se presento en el pueblo. Un día un joven lo vio haciendo rituales de mal en la propia iglesia. El joven no lo podía creer (dado que el sacerdote era un santo para ellos) Entonces fue a decirlo a todo el pueblo de lo que había visto. Pero nadie creyó lo que decía.

Otro día un señor fue a rezar a la iglesia. Como a la una de la tarde el señor encontró al sacerdote haciendo rituales (para ello en el pueblo había mucha producción, pero cada día se volvía menos productivo) el señor se impresionó y luego reunió a todos los pobladores en la plaza y dijo a todos ellos lo que había visto. La gente le creyó porque
Era un señor que jamás había mentido.

Entonces todos los pobladores se pusieron de acuerdo para expulsarlo del pueblo. Cuando todos se acercaban a la iglesia, uno de los pobladores se acercó primero que todos y le dijo: sacerdote muchos pobladores lo han visto haciendo rituales. El sacerdote le contestó: no es cierto, yo soy un enviado de Dios, pero a pesar de su explicación nadie le creyó y todos los pobladores en voz fuerte dijeron ¡que se vaya! ¡no lo queremos!. El sacerdote les dijo que nunca se iría de allí.

El pueblo se puso de acuerdo en que deberían quemarlo para que la maldición se fuera (porque cada vez se moría el ganado y la flora secaba) entonces fueron y rompieron la puerta de la iglesia y sacaron al sacerdote en medio de la plaza. Lo quemaron a la 1 de la tarde, pero antes que lo quemen dijo lo siguiente: ustedes serán maldecidos. ¡Todos Uds. morirán!.

El pueblo no creía que la maldición se cumpliera. Los pobladores celebraron hasta la madrugada del día siguiente. Se despertaron un día después de lo acontencido y notaron que la ganadería había aumentado.

Todos decían: ya lo ven, el sacerdote era la maldición del pueblo y todos ellos estaban muy contentos.

El mismo día a las 4 de la tarde el río se desbordó en el pueblo. Todos se desesperaron. Murió la mitad de la población del pueblo y toda la ganadería. La otra mitad logró escapar a los cerros más altos donde no llegaron las aguas. Todos los pobladores se metieron en cuevas. Unos decían que la maldición del sacerdote había ocurrido. Los que estaban a un lado decían que tenían razón y lo lamentaban. De un momento a otro el aire venía con fuego y todos los que estaban en las cuevas se quemaron y el pueblo desapareció. Hoy en día nadie vive en ese pueblo.


Las respuestas se reciben hasta las 3 p.m. del día lunes.

Vía tío Juan: Cuento largo pero moderno

Cuento largo pero moderno
(adaptación a la criolla de CH.D.)

Un joven hombre de negocios decide realizar un crucero por el Pacífico para relajarse y olvidarse de los problemas. Pero una noche estalla una fuerte tormenta que finalmente hunde al barco.
Nuestro hombre consigue aguantar en medio del oleaje agarrado a un salvavidas, y cuando la tormenta cede, está en la playa de una hermosa isla, llena de palmeras plataneras y cocoteros.
Varia semanas después, cuando ha perdido toda esperanza, un buen día observa asombrado que se acerca una pequeña balsa tripulada por una joven y guapa mujer.
-Vivo al otro lado de la isla -le dice-. Supongo que tu también serás superviviente del crucero en el que viajaba yo.
Si -contesta el hombre-. -Pero… dime. ¿Cómo has hecho para construir esa balsa?
-Extraje el látex de algunas plantas, y con árboles de eucalipto… -contestó la joven.
La chica, mientras hablaba, miraba a su alrededor.
-Oye. ¿Dónde vives tú? No veo por aquí ninguna construcción para protegerte.
-No hay ninguna. Me he protegido debajo de las palmeras.
-Anda, sube -dice la muchacha, señalando la balsa- Te invito a mi choza.
Cuando llegan al otro lado de la isla, el hombre observa asombrado la perfección con que la chica ha construido la choza.
-¿Quieres tomar algo? -le ofrece ella.
-No, gracias. Estoy ya saturado de tomar agua de coco.
-No es agua de coco normal. He construido un pequeño sistema de destilación, lo macero con piña, y lo que te ofrezco es auténtica piña colada.
Mientras toman los refrescos, la mujer lo mira con curiosidad.
-Oye. ¿Tú siempre has llevado la barba así de crecida?
-No, no –responde. -Siempre me ha gustado ir bien afeitado… Pero aquí, en la isla, no he tenido ningún instrumento para hacerlo…
-Pues ahora sí puedes. He fabricado un instrumento con el que me depilo las piernas, y también podrás tomar un baño templado, con un sistema que he ideado. Pasa al interior y verás.
El se afeita perfectamente con un aparato hecho de gruesas espinas de pescado, y una concha muy afilada. Y se baña en el agua templada que sale de un tubo que atraviesa la pared de la choza.
Cuando termina, limpio y afeitado, la joven lo mira con una sonrisa de complacencia. Le indica que se acomode en una amplia hamaca de su creación, y le dice:
- Ahora mismo vuelvo. Me voy a poner algo más cómodo para la noche.
A los pocos minutos regresa, con el pelo suelto hasta la cintura, caminando despacio, contoneando las caderas. Lleva puesto un breve bikini hecho de hojas. Se dirige al hombre, que ahora está medio adormilado después del relajante baño y con una pícara sonrisa, adelantando el generoso y perfumado busto, le susurra al oído:
-Oye. Después de todo este tiempo que has estado solo… ¿No te gustaría hacer algo que no has podido hacer, y que tanto nos gusta a los hombres y a las mujeres?
Nuestro amigo abre los ojos con asombro. Se incorpora de golpe, y presa de la emoción dice:
-¡¡¡NO ME DIGAS QUE PUEDO REVISAR MI CORREO ELECTRÓNICO!!!

sábado, febrero 17, 2007

Un quirón que escribe con el arco

Y bloguea a flechazos. El Bar 505, un blog estrenado hace unos meses por un quironazo, tiene post nuevo. A ver si acepta la propuesta de clavarle un contador, que no baile pero angustie. Cuentos, poemas, y demás secreciones de este cuadrúpedo en http://bar505.blogspot.com