Si las penas se digieren, nos asfixiaríamos. A veces se agota el ruido, la distracción, esa es la única salvación. Y en medio del silencio, cuando la papita se acabe, qué nos queda?
La distracción de las penas. Quiero distraerme mientras caigo al hoyo black de todas las penas reunidas. Quiero distraerme. Acariciar mis cuchillas, ya oxidadas por falta de uso. Acariciarlas nada más. Porque todo esto duele más que todos los filos y todas las sangres que he absorvido, a parte de las marcas que han quedado que me recuerdan que no lo volveré a hacer cada vez que alguien me pregunta qué te pasó. Por suerte no han preguntado qué te hiciste. Quiero días nublados, con garuas finas, caminar con ella por esa vereda que nos lleva a su playa, mientras nos metemos cada vez más hondo en nuestras penas y alegrías, y viceversa.
2 comentarios:
Si las penas se digieren, nos asfixiaríamos.
A veces se agota el ruido, la distracción, esa es la única salvación.
Y en medio del silencio, cuando la papita se acabe, qué nos queda?
una lágrima
La distracción de las penas. Quiero distraerme mientras caigo al hoyo black de todas las penas reunidas. Quiero distraerme. Acariciar mis cuchillas, ya oxidadas por falta de uso. Acariciarlas nada más. Porque todo esto duele más que todos los filos y todas las sangres que he absorvido, a parte de las marcas que han quedado que me recuerdan que no lo volveré a hacer cada vez que alguien me pregunta qué te pasó. Por suerte no han preguntado qué te hiciste.
Quiero días nublados, con garuas finas, caminar con ella por esa vereda que nos lleva a su playa, mientras nos metemos cada vez más hondo en nuestras penas y alegrías, y viceversa.
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